La manzanilla es una de las plantas medicinales más utilizadas en la medicina y la cosmética natural, pero sobre todo es uno de los grandes ingredientes que no faltan para el cuidado de la piel. Si quieres saber más de las Propiedades de la manzanilla haz clic aquí.
Para hacer tu propio aceite esencial de manzanilla casero y obtener sus beneficios, toma nota y no pierdas detalle...
Ingredientes:
1/2 taza de flores secas de manzanilla (En cualquier tienda naturista o herbolario las consigues)
250 ml de aceite de oliva virgen
1 cucharadita de vitamina E
2 frascos de vidrio
1 Colador
Preparación:
Esteriliza uno de los frascos de vidrio: Sumerge en agua hirviendo durante unos minutos, retirar y dejar secar. Después de haber secado el frasco, llénalo aproximadamente 3/4 partes con aceite de oliva.
Luego añade las flores de manzanilla y remueve hasta que todas las flores queden completamente cubiertas por el aceite. Cuando lo hayas conseguido puedes ponerle la tapa al frasco, asegurándote de que haya quedado bien cerrado.
Coloca el frasco de vidrio en donde le dé el sol, todos los días, unas horas, durante 15 o 20 días hasta que la mezcla se asiente. Deberás abrir con mucho cuidado y secar la humedad que suele acumularse en la parte interior de la tapa, con una servilleta de papel limpia. Al cerrarlo, agítalo de enérgicamente.
Pasado ese tiempo, vierte el aceite de manzanilla a través de un colador en un frasco nuevo de vidrio, previamente esterilizado.
Por último, añade la vitamina E al aceite de manzanilla y agita bien para que todos los ingredientes se integren por completo. Ya tienes tu aceite de manzanilla listo para usar.
Cuéntame, ¿Ya tienes tu aceite?, ¿Has comprobado los beneficios de este aceite?
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